El Reactor Natural de Oklo
Descubre cómo el reactor natural de Oklo en Gabón fue un proceso de fisión nuclear natural autosostenida que ocurrió hace 1.700 millones de años. Aunque no fue explotado por seres humanos, este fenómeno proporciona valiosas lecciones para el diseño de almacenes geológicos profundos para residuos nucleares y muestra cómo la energía nuclear puede surgir en la naturaleza.

En 1972, un físico francés que trabajaba en una planta de procesamiento de uranio en Pierrelatte, Francia, observó una anomalía en una muestra de uranio natural proveniente de Gabón, África. La proporción de uranio-235 (U-235) era de 0,7171%, ligeramente inferior al 0,7202% habitual. Este hallazgo desencadenó una investigación que reveló un fenómeno asombroso: en la región de Oklo, hace aproximadamente 1.700 millones de años, existieron reactores nucleares naturales que funcionaron de manera autosostenida durante cientos de miles de años
¿Cómo Funcionaban los Reactores Naturales de Oklo?
Para que ocurriera una reacción nuclear autosostenida, se requerían tres condiciones esenciales:
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Alta concentración de U-235: En aquella época, el uranio natural contenía aproximadamente un 3% de U-235, suficiente para iniciar una reacción en cadena.
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Masa crítica: El uranio debía estar en una masa crítica de al menos 70 cm de grosor para evitar que los neutrones se escaparan.
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Presencia de agua: El agua actuaba como moderador, ralentizando los neutrones y permitiendo que la reacción en cadena se mantuviera
Implicaciones para el Almacenamiento de Residuos Radiactivos
El fenómeno de Oklo ha proporcionado valiosa información sobre el comportamiento de los productos de fisión en condiciones naturales. La capacidad del yacimiento para retener estos productos durante miles de millones de años ha sido clave para diseñar almacenes geológicos profundos (AGP) para residuos radiactivos. Este descubrimiento demuestra que el almacenamiento seguro de residuos a largo plazo es posible, como ocurrió en Oklo.
¿Por Qué No Existen Reactores Naturales Hoy en Día?
Las condiciones que permitieron la formación de reactores naturales en Oklo ya no existen. La concentración de U-235 en el uranio natural ha disminuido significativamente debido a su desintegración radiactiva. Actualmente, el uranio natural contiene solo un 0,72% de U-235, insuficiente para iniciar una reacción en cadena autosostenida. Además, los cambios geológicos y climáticos han alterado las condiciones en la región.
El descubrimiento del reactor natural de Oklo ha ampliado nuestra comprensión de la fisión nuclear y su ocurrencia en la naturaleza. Este fenómeno no solo es un testimonio de la complejidad de la Tierra primitiva, sino también una fuente de conocimiento para la ciencia nuclear moderna. El estudio de Oklo continúa siendo una referencia fundamental en la investigación de reacciones nucleares naturales y el almacenamiento de residuos radiactivos.
Aunque no se explotó energéticamente, su hallazgo es muy valioso:
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Confirmó que la fisión nuclear puede ocurrir en la naturaleza.
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Proporcionó un modelo real sobre cómo se comportan los residuos nucleares en el subsuelo durante millones de años.
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Apoya la seguridad del almacenamiento geológico profundo, crucial para la gestión de residuos nucleares modernos.
No es un reactor tal como lo entendemos hoy (un sistema controlado por humanos). Es más bien un proceso natural autosostenido que, en efecto, se comportó como un "reactor" porque generó energía de forma continua y controlada por las condiciones de la naturaleza. Sin embargo, no fue diseñado ni supervisado por ningún ser human